porque sonó el telefonillo de casa y eLLa corrió al pomo de la puerta y sin zapatos (descalza)
porque la esperó impaciente y felíz en el descansillo del tercero C bailando el baile del alboroto
porque al verla se ava lanzó a sus brazos, porque le llenó de besos y abrazos de oso
porque escucharla y sentirla con nosotras, aunque sea a cuenta-horas, nos hace volver a (re) vivir
porque la queremos y deseamos, ante todo, que siga siendo tía S.
porque sin duda es parte de nuestra vida
porque aunque viéndola supone no verla por un tiempo prefiero verla
porque siempre (s i e m p r e) estaremos-estarás-estaré ahí.
