horas más tarde llovía (en la ciudad inhóspita), volvíamos a casa (ocultas bajo su paraguas).
3/4 de familia se cruzaron en nuestro camino: una madre empapada con sus dos hijos enchulando gorros de lana (de esos, señora, que calan).
al llegar a la altura de N el hermano mayor dijo:
- mira mamá tan pequeña y lleva paraguas, Adri no sabe llevar paraguas
la mamá (nada diplomática) le contestó:
- es cierto, es más pequeña que Adri y ya lleva paraguas, mira que bien lo hace, ya podrías aprender Adri.
Y fue ahí, en ese momento, donde Adri (con cara de niño afectado) gritó (pequeña revolución):
- ¡¡¡¡¡ esa niña es tonta !!!!!
....
(demasiado pesado, el aire)
mis pies se entumecieron, hubo bloqueo instantáneo ¿pero qué se hace en estos casos?
....
nada, no se hace nada (n-a-d-a) fue mi letra favorita del abecedario, la enorme N quien se clavó, giró 180 grados, miró al niño afectado y sentenció:
- no, no soy tonta.
una vez dicho esto, eLLa, mi pequeña Luther King latina, se incorporó siguiendo su camino, a paso lento, mirando de reojo al niño Adri, sintiendo (quizás) que las cosas aún podían empeorar.
Y sucedió
el pequeño Adri lo entendió (2/3 de familia respiraban cargados de alivio):
- no, esa niña no es tonta, es guapa.
- si, es guapa (dijo el hermano)
- si muy guapa (reafirmó la madre)
Busqué la mirada de N (entre su cuerpo menudo envuelto por un equilibrio recién satisfecho, esa sublime paz que tanto ama).
me miró y dijo:
- (el semáforo) esta verde mamá, a cruzar.
